sábado, 16 de febrero de 2013

50 sombras de Grey

Ya terminé de leer 50 sombras de Grey... ¿Qué puedo decir del libro? Me gustó, hizo volar mi imaginación ¡más rápido que infinitum! Jajajajaja

Avance bastante rápido, no lo terminé antes porque se me atravesó "Esta noche dime que me quieres". Y porque justo este mes me llené de mucho trabajo y el jefe puso un programa raro en las pc's de la oficina para ver lo que cada quien veía en su computadora.. Así que ¡OSO MIL! que leyera que después de comer, corría de nuevo a la oficina para leer esas cosas eróticas que contiene Fifty Shades of Grey.

Así que lo terminé de leer a ratitos, en la noche, en la mañana muy temprano y por fin, puedo decir que me gustó a medias.. Quizás me haga falta leer toda la saga para emitir una opinión más justa, pero el modo en el que Christian se enamora de Anastasia, aún cuando ella misma se describe como poca cosa y el como el más wow del mundo mundial fue tan trillado... Me recordó mucho a Twilight, y recordé que Grett ya me había hecho esa advertencia con respecto a que estos dos personajes son los alter-egos sexosos de Bella y Edward..

No considero que sea un libro apto para menores de 18 años, por la carga de contenido erótico-sexual bastaaante explicito y porque luego de leerlo y a como estamos como "suciedad" no dudaría que esta nueva generación se hiciera de adultos jóvenes con tendencia al sadomasoquismo.

En fin, Yahir me dijo que cualquier wey con los medios con los que pintan al tipo, con el poder de viajar el helicóptero  regalar teléfonos  laptops y autos podría conquistar y volver esclava a cualquiera... Tristemente... Coincido.

Hay muchas frases que sin duda se volvieron mis favoritas, y sobre todo.. Las que creo me identifican con mi actual situación..

"Me he enamorado de alguien tan emocionalmente cerrado que no conseguiré más que sufrir"

"Me aterra la intensidad de lo que siento por ti y el camino tan oscuro por el que me llevas... A los 3 meses podrías pasar de mi y ¿Cómo me quedaría yo?"

"Quiero que te ridas a mi en todo voluntariamente. Por complacerme. Quiero que quieras complacerme."

"Me desea, pero necesito más. Necesito que me desee como yo lo deseo y lo necesito, y en el fondo, sé que eso no es posible."

"¿Qué le digo? Porque creo que te quiero y tú solo me ves como un juguete. Porque no puedo tocarte, porque me aterra demostrarte algo de afecto por si te enfadas, me riñes o, peor aún, me pegas… ¿Qué le digo?"

"No quiero perderlo. A pesar de sus exigencias, de su necesidad de control, de sus aterradores vicios. Nunca me había sentido tan viva como ahora. Me emociona estar sentada a su lado. Es tan imprevisible, sexy, listo, divertido… Pero sus cambios de humor... ¿Qué le digo? En el fondo, querría más, más afecto, más del Christian travieso, más… amor."

"Mi subconsciente tiene razón, claro. Lo estoy agobiando. Él no está preparado y yo tampoco. Hacemos equilibrios sobre el delicado balancín de nuestro extraño acuerdo, cada uno en un extremo, vacilando, y el balancín se inclina y se mece entre los dos. Ambos necesitamos acercarnos más al centro. Solo espero que ninguno de los dos se caiga al intentarlo. Todo esto va muy rápido. Quizá necesite un poco de distancia."


"Estoy en este piso de fantasía, teniendo un sexo de fantasía con mi novio de fantasía, cuando la cruda realidad es que él quiere un contrato especial, aunque diga que intentará darme más. ¿Qué significa eso? Eso es lo que tengo que aclarar entre nosotros, para ver si aún estamos en extremos opuestos del balancín o nos vamos acercando."


"Como experiencia física, ha sido muy satisfactoria. En cambio, emocionalmente… bueno, me desconcierta su reacción, y eso es tan enriquecedor emocionalmente como nutritivo el algodón de azúcar."

"Es la persona más complicada que conozco y no alcanzo a comprender sus estados de ánimo cambiantes. Parecía estar bien cuando he entrado en su estudio. Lo hemos hecho… y luego ya no estaba bien. No, no lo entiendo."

"—¿Me vas a echar de menos?
Lo miro, sorprendida por la pregunta.
—Sí —respondo con sinceridad.
¿Cómo puede haber llegado a significar tanto para mí en tan poco tiempo? Se me ha metido bajo la piel, literalmente. Sonríe y se le ilumina la mirada.
—Yo también te voy a echar de menos. Más de lo que imaginas —me dice.
Se me alegra el corazón al oír sus palabras. Lo está intentando, de verdad. Me acaricia suavemente la mejilla, se inclina y me besa con ternura."

"¿Tiene miedo Christian de lo que siente por mí? ¿Siente algo por mí? Parece muy entusiasmado, dice que soy suya… pero eso forma parte de su yo dominante y obsesivo que debe tenerlo y poseerlo todo, seguro. Me doy cuenta de que, mientras esté fuera, tendré que repasar todas nuestras conversaciones y ver si puedo detectar algún indicio claro.
«Yo también te voy a echar de menos. Más de lo que imaginas.» «Me tienes completamente hechizado.»"

Y entre estas, muchas otras más... Ah que pinshis hombres complicados, cuando no tienen secretos inconfesables, pasados tenebrosos, o ¡tendencias al sadomasoquismo! jajajajajaja

No hay comentarios.: